1. |
|
|||
Para hablar de nuestra existencia debemos enfocarnos en algo más allá de lo ideológico: institución de las jerarquías, el disfraz de la tolerancia en el lenguaje deforme de la democracia: una explicación inexistente para un mundo que nos abraza.
Lo que llamamos resignación no es más que un letargo de tranquila desesperación, vuelta como una confirmación de nuestros errores, como una confirmación de cada una de nuestras derrotas:
Recurrentes,
Cercanas y lejanas,
Indescriptibles como indescifrables.
Estamos tan acostumbrados a arrastrar cicatrices y golpes que a la fuerza seguimos aprendiendo a estar en desencuentro.
Nos desligamos de aprecio alguno a los tiempos presentes y a pesar de eso nos domina el desespero, porque del desespero de la ciudad al ocaso de un inexistente futuro hay un túnel ciego que nos hace morir más deprisa, donde creemos que dejamos todo para vivir en él.
Negar lo que se nos niega, sin tener que ofrecer algo a quien nos quiera hacer olvidar o silenciar el pensamiento, siendo una lucha que nos recuerde que la vida puede ser completamente distinta sin abstraernos del mundo.
Consideramos al trabajo como actividad separada de nosotros mismos, convertida en algo que alimenta la mercancía y que nos domina; no queremos hacer de esta necesidad una virtud, ni queremos discutir una nueva forma de medir nuestros sacrificios, porque somos nosotros mismos los que lo alimentamos.
Negar lo que se nos niega, sin tener que ofrecer algo a quien nos quiera hacer olvidar o silenciar el pensamiento, siendo una lucha que nos recuerde que la vida puede ser completamente distinta sin abstraernos del mundo.
Nuestro antagonismo con respecto al capital es una realidad que debemos hacer estallar.
Estamos tan acostumbrados a arrastrar cicatrices y golpes que seguimos aprendiendo a estar en desencuentro.
|
||||
2. |
|
|||
Vivimos nuestras desgracias como un destino que nos ha tocado vivir donde no podemos sentir.
Autoayuda, calmantes, psiquiatría, aislamiento, consumo, drogas, obediencia…
Perdimos lazos que nos hacen sentir en común, a través de nuestro lenguaje, medios que nos permitían hacernos cargo de nuestras necesidades.
Perdimos lazos que nos hacen sentir en común, a través de nuestro lenguaje, medios que nos permitían hacernos cargo de nuestras responsabilidades.
Transitamos por una mirada en común que nos lleva del enojo al miedo, del miedo al silencio, de nuestras desventuras al sueño, del sueño a los recuerdos y de los recuerdos al vacío.
En un invierno que será nuestro para siempre, despojados de contenido, ofrendas de una servidumbre voluntaria.
En un invierno que será nuestro para siempre, en una dependencia sin sueños, seguimos perdiendo nuestras vidas de frente al trabajo.
Perdimos lazos que nos hacen sentir en común.
|
||||
3. |
Fiume 1918/A
06:38
|
|
||
Si de algo debemos aprender es de nuestras derrotas, para alguna vez revolucionar la realidad hasta tal punto que se haga imposible toda vuelta atrás. Parecemos estar bajo el peso de la historia, el pasado yace a nuestras espaldas como una mano muerta, guiando y controlando nuestras vidas.
Un lugar de tradición contestataria en una batalla pérdida, defendiendo posturas inservibles y desfasadas. Nuestras constantes referencias al pasado son insignificantes e incompresibles para los demás, nos impiden darnos cuenta de lo que sucede realmente a nuestro alrededor.
Lo que necesitamos son momentos intensos y sublimes, un instante atemporal pendiendo del infinito con cicatrices provistas de reflexión y análisis que hagan que el sistema de control regulado por el tiempo sucumba ante la radiación pasional, en el sentir y el existir para siempre.
“El hombre debe vivir cada día, o no vivirá nunca. La alegría y la libertad deben ser parte de su vida cotidiana. Cualquier solución o revolución que propongamos, debe estar orientada hacia el presente más que hacía el futuro si pretende ser verdaderamente revolucionaria”.
|
||||
4. |
Fiume 1918/B
06:41
|
|
||
5. |
Fiume 1918/C
02:37
|
|
||
6. |
Aparcoa
13:49
|
|
||
Nuestros mapas actuales describen un mundo sobre el cual ningún ser humano ha puesto jamás un pie: un mundo de distancias medidas con exactitud, de símbolos estandarizados, detenido, congelado en el tiempo, vacío de resistencias emocionales: un mundo objetivo, al fin, cuando todos sabemos que no existe mundo que no sea subjetivo. Estos mapas contienen tan poca información relevante para la vida humana que no es extraño que nos perdamos en ellos: no hacemos más que dar vueltas, tratando de llegar “a tiempo” a los destinos predeterminados, sin tener idea de hacia dónde vamos ni para qué, por no hablar de qué es lo que deberíamos encontrar realmente entre el cúmulo de autopistas en torno a Santiago Región Metropolitana, Matta Sur, Barrio Brasil, San Isidro, Catedral, San Bernardo, Recoleta, Villa Francia, Santa Isabel, Portugal, Punta Arenas, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Río Gallegos, Valdivia, Chillán, Los Ángeles, Concepción, Tomé, Temuco, Valparaíso, La Plata, Porto Alegre, Florianópolis, Río de Janeiro, Sao Paulo, Montevideo, Blumenau, Santo André.
Mapas Auténticos del Mundo Imaginario.
Mapas Imaginarios del Mundo Real.
Si creáramos nuestros propios mapas, delineando nuestras propias experiencias individuales en lugar de seguir sumisamente los datos arrojados por fríos instrumentos, tal vez daríamos con lo que realmente significa vivir como un ser humano sobre el mundo. De ese modo, podríamos intentar crear al fin y al cabo un mundo para seres humanos y no para objetos ni instrumentos.
|
Manual de Combate Santiago, Chile
Dúo de bajo y batería en Santiago de Chile desde el 2016. Ética HTM/DIY y cambios sistemáticamente conformes al avance del
tiempo y en función del ruido, instrumentos no convencionales en el punk: saxos, trompeta, flauta traversa & sintetizador.
Sudamérica.
manualdecombate@riseup.net
... more
Streaming and Download help
If you like Mapas Auténticos del Mundo Imaginario. Mapas Imaginarios del Mundo Real, you may also like:
Bandcamp Daily your guide to the world of Bandcamp